Capítulo 4. Persecución

Si revisamos el manga, nos encontramos muy al principio del capítulo esta viñeta en la que L se revela en una posición muy explícita de budismo. Y es que el budismo se encuentra a caballo entre uno y otro, al profesar la compasión se aleja del dios pagano de Nietzsche pero en el resto de elementos se acerca bastante a éste.

El Budismo, por tanto, es la otra gran influencia filosófica en “Death Note”, como bien revela esta viñeta. También el budismo fue una gran influencia en el pensamiento nietzschetiano. Sobre todo a través de Schoppenhauer.

Y es que Schoppenhauer es el principal precursor del vitalismo nietzscheano, al reinterpretar la epistemología kantiana, haciendo del fenómeno mera ilusión, tras la que se oculta la voluntad infinita y ciega, la fuerza, tendencia o impulso universal, que se objetiva, mediante el espacio y el tiempo, en una pluralidad de cosas, que no son otra cosa que la representación fenoménica, es decir, pura apariencia, de esa tendencia o voluntad universal; el ser humano es la individualización consciente de esa fuerza ciega; la voluntad humana es deseo siempre insatisfecho; por esto debe liberarse a través de la disolución del yo individual en la voluntad universal que promueve la moral. Esto último es de clara inspiración budista.

Aunque la cosa no acaba ahí. Recordemos que Nietzsche encuentra influencias que van más allá de las religiones. Si pensamos que el autor alemán se inspiró mucho en los presocráticos, tomando algunas ideas de estos autores (especialmente Heráclito) como el eterno devenir, pensemos en la lucha de los contrarios en la dialéctica, tan presente en “Death Note”, y que en este capítulo empezará a volverse encarnizada. Una dialéctica que el propio Light expondrá a Ryuk: “Las personas somos unos seres vivos estúpidos, con anverso y reverso”.

Más cosas. En la página siguiente dice Light: “¿Acaso confiarías tú en alguien cuyo nombre y rostro desconoces?”. El caso del nombre es algo fundamental en la mentalidad oriental. Otro manga reciente, “Monster”, también hacía del hecho del nombre un leit motiv recurrente.

Light necesita el nombre de la víctima para matarlo, pero su nombre auténtico. Algo muy similar a lo que sucedía en “Monster”. Todo en estos mangas gira en torno al nombre, ya no sólo por su significación (Luz, Seis, etc.). Citando a Juan Zapater, “El ser humano, en cuanto ser y sujeto, demanda un nombre, un rasgo de singularidad que afiance su subjetivismo y en el (con el) que quede inscrita su procedencia. La ausencia de nombre no es una cosa de broma. Sin un nombre se le priva al hombre de identidad y sin ella, nada existe. Es el nombre propio el que concreta y singulariza al ser, lo que le pertenece y lo que lo designa”. La reflexión es interesante si tenemos en cuenta que Light tiene varios nombres (Light Yagami, Kira) y L ninguno, sólo una inicial. Pero ya veremos que L es mucho más que esa letra. No sólo tiene nombre, sino que tiene varios, como Light. Pero eso ya lo veremos.

Pero lo más interesante de todo viene aquí. En el libro del Génesis leemos: “Y Dios formó del suelo todos los animales del campo y todas las aves del cielo y los llevó ante el hombre para ver cómo los llamaba, y para que cada ser viviente tuviese el nombre que el hombre le diera”.

¿Qué escribe Light en la libreta? Nombres.

Sí. Como en la Biblia...

Capítulo 3. Negociaciones

Ya la portada del episodio 3 del manga dice mucho. Light empuñando una guadaña, custodiado por Ryuk.

Aún no hemos hablado de un elemento del relato que también resulta interesante señalar. Sayu, la hermana de Light. Es la primera mujer que aparece en un relato donde las mujeres están muy relegadas a un segundo plano. Apenas aparecen y, cuando lo hacen, suelen ser bastante inútiles y/o pasivas.

En este caso, esta primera aparición, por supuesto, fue “pidiendo ayuda” a su hermano Light. Light, como encarnación del aspirante a Súper Hombre nietzschetiano, concibe a las mujeres como un instrumento o un ser inferior, aunque a veces pueda ser un estorbo o un obstáculo en sus objetivos. Para Nietzsche la mujer era una esclava o una tirana, siempre incapaz de generar amistad.

Por tanto, es normal que en el mundo de Light la mujer esté relegada a estos paupérrimos roles. En el entorno contrario la mujer tendrá un papel algo más activo, pero eso ya lo veremos.

De nuevo en este episodio se reitera en el mismo lenguaje religioso tanto sonoro (esa música religiosa coral) como visual (ese poste eléctrico que se intercala entre los sacrificios de Light y que tiene forma de extraña cruz).

En el minuto 4 de este capítulo, de nuevo se siembra la duda. ¿Kira es un criminal o un salvador? Matsuda, uno de los agentes de la policía que investiga el caso, lo pone sobre el tapete: “En los últimos días se ha observado en todo el mundo y especialmente en Japón, una disminución de radical de crímenes graves que van más allá de simples hurtos”.

De boca de su hermana: “Eres un genio Light”.

En este capítulo hay otras revelaciones a nivel de trama, como que Light es el hijo del inspector que dirige el caso de Kira o las deducciones constantes de L.

Por supuesto, para recibir a su padre, éste no sube, sino que el hijo “baja” al “mundo humano” para saludarlo y darle la bienvenida a casa.

Sólo aquel que Dios elige puede entrar en su reino.

Amén.

Capítulo 2. Duelo

Voy a empezar con una obviedad. Pero es que voy a intentar poner por escrito todos los elementos visibles en esta obra. Hay un dicho popular “La pluma es más fuerte que la espada”, atribuido a Edward Bulwer-Lytton. Pocas veces esta frase ha tenido tanto poder como en este manga. Una traslación literal de esta frase a imagen la vimos ya en el primer capítulo del anime:




En el capítulo 2 entra en juego el que será el gran rival de Light. ¿Cuál es el rival del Dios de Nietzsche, del Súper Hombre de la nueva era? Por un lado, claro está, el Dios Cristiano. Pero no el único, como veremos.

En el segundo episodio aparece el otro personaje esencial de la trama: L. Será el archienemigo de Light el resto de la historia, su perseguidor implacable.

L es un personaje del que el mundo poco o nada sabe. Permanece en la sombra, nadie sabe quién es en realidad. En este episodio se presenta como un enigma dentro de un acertijo. Nadie sabe si es hombre o mujer, joven o viejo. Nadie conoce su nombre, su ubicación, ni siquiera el rostro. L es un seudónimo, claro está. Sólo se sabe que es el mejor detective del planeta. Y a él acuden para que esclarezca quién está matando a tantos criminales a lo largo y ancho del mundo.

Ahora un inciso: “Death Note” es una creación de Tsugumi Ohba, su guionista. Pues bien. De este autor poco o nada se sabe. No se le conocen otros mangas que haya escrito antes que “Death Note”. Ni siquiera se sabe si ése es su verdadero nombre o un pseudónimo. Nadie le ha visto jamás el rostro. Sólo se sabe que escribe sus guiones sentado en cuclillas en una silla.

Exactamente igual que L.

Por tanto, podemos decir sin temor a equivocarnos, que L es el alter ego de su anónimo autor, Tsugumi Ohba.

Por cierto, hay hasta quien sospecha que Ohba es, en realidad, una mujer. Pero ya digo que nadie sabe nada con certeza de esta persona.

Volvamos al relato.

En este episodio la primera frase de Light (de nuevo con la luz del sol incidiendo en su rostro) es: “De pronto le inundó una sensación de satisfacción y felicidad, al ver que su sueño por fin se había hecho realidad”.

Tras la presentación del misterioso L, por fin se hace alusión al “alias” que Light Yagami usará como “limpiador del mundo”: Kira (la traslación fonética japonesa de la palabra inglesa killer –asesino).

Y por primera vez veremos cómo gran parte del mundo empieza a creer en este asesino de masas (aunque sean masas criminales) como “El Dios del nuevo mundo” o incluso, ya más explícitamente, “El Mesías”. Un dios llamado Kira (asesino) hace que uno piense inmediatamente, de nuevo, en el planteamiento ideológico de Nietzsche.

El Súper Hombre ha llegado, ha bajado de la montaña. Y las hordas están dispuestas a adorarle. “Así son los seres humanos”, dice Light a Ryuk.

Pero lo que Light no sabe es que está a punto de conocer a su gran rival: L. El primer enfrentamiento está a la altura de las circunstancias y L consigue que Light caiga en su primera trampa, estableciendo que Kira está en Japón y en una zona muy concreta. Además, deduce la forma en que Kira puede matar. Todo ello con un elaborado e ingeniosísimo plan.

Por otro lado, que L sea la primera letra del nombre Kira (Light) tampoco será casual. Light y L son dos caras de la misma moneda. Ambos son dioses. Opuestos. Pero dioses al fin y al cabo, y por tanto –como se verá en detalle- con más cosas en común de las que ni ellos mismos pueden pensar.

La última imagen de este capítulo pone esto de manifiesto. Light y L, casi en idénticas posiciones, dirán exactamente el mismo diálogo: “Te juro que te encontraré y acabaré contigo, porque la justicia está en mi mano”. Justo la base ideológica de todas las luchas religiosas en el mundo. Los dos dioses ya se conocen, se han encontrado, van a enfrentarse y hemos presenciado el primer asalto.

Y el diablo, Ryuk, es testigo de todo ello: “Permíteme que haga de espectador de este duelo”, dice el shinigami en la última frase del capítulo en el manga.

El mundo, aún en el siglo XXI, sigue siendo campo de batalla entre religiones. Y el Diablo, sonriente, observa sin necesidad de mover un dedo.

Capítulo 1. Renacimiento

Esta historia se inicia en el mundo de los Shinigami. Curiosamente, en una obra sobre el choque entre dos divinidades contrapuestas, el único ser sobrenatural que aparece en la historia son estos seres.

El Shinigami, dios japonés de la muerte, es una versión oriental de las Valkirias occidentales. Y las Valkirias fueron inspiración de Wagner, recordemos. Según la mitología su función es velar y decidir quien muere y cómo, a veces hasta alimentándose de las almas humanas. En el Budismo hay una figura análoga a los Shinigami, por cierto, que es Emma.

¿Qué simbolizan estos seres? Ya lo veremos.

El caso es que resulta curioso el título del primer capítulo: Renacimiento.

Pero antes de nada, una aclaración. El manga original tenía un título distinto: Aburrimiento. Ryuk se aburre. Light se aburre. La primera página muestra el aburrimiento de los dos personajes.

En filosofía, sobre el aburrimiento han escrito Søren Kierkegaard, Arthur Schopenhauer, Friedrich Nietzsche y Neil Postman. En concreto, Kierkegaard tenía la teoría de que el aburrimiento fue lo que pobló al mundo: Dios se aburría y, por eso, creó a Adán; como Dios y Adán se aburrían, vino Eva, etc.

Filósofos y moralistas han insistido sobre este temple de ánimo, vinculándolo a un sentimiento que tiene como correlato, lo cósmico. Pascal decía que sin la diversión caeríamos fácilmente en el aburrimiento. La diversión nos deleita y nos facilita la vida, haciéndonos llegar inadvertidamente a la muerte.

Schopenhauer observaba que apenas la miseria y el dolor conceden al hombre una tregua, el aburrimiento se acerca en seguida.

Kierkegaard aproxima el aburrimiento a la melancolía. Y lo considera como una de las consecuencias del ejercicio de la vida estética. Uno de los tres primeros niveles o formas en que se puede vivir la existencia humana.

En efecto, Dios creó el mundo porque se aburría. Y Light Yagami creará su mundo ideal, su mundo perfecto (el mundo del Súper Hombre), fruto del aburrimiento.

Este mundo que creará se contrapone al mundo actual porque, como su primera frase del relato (el manga) dice: “Este mundo está podrido”.

En la página 11, del cielo cae una libreta. Y Light, aburrido, la recoge. El símil bíblico es claro.

Pero vayamos ahora al anime. Si vemos la cabecera, la última imagen es la de una manzana, que se transforma en el cuaderno. En toda la cabecera sólo una persona muerde la manzana: Light, el mismo que coge la libreta. Por tanto, si la manzana y el libro son análogos o equivalentes, ¿qué son la libreta y la manzana? Exactamente lo mismo. ¿Y qué simboliza la manzana en la simbología religiosa? Claramente, el pecado.

Los símiles religiosos se repiten por doquier. La banda sonora tiene un continuo estilo eclesiástico ascético. La cruz es un símbolo constante (la portada del primer manga ya la contiene, y en la cabecera hay varias, incluyendo la que circunscribe el título de la serie).
Las primeras palabras que pronuncia Light Yagami en el anime son distintas a las del manga: “Sigue las enseñanzas de Dios. Y entonces el mar te bendecirá con generosidad, y no habrá tormentas”. Pero, ¿de qué Dios?

Tras esto, es cuando escuchando las noticias sobre brutales crímenes uno se pregunta cómo puede estar este mundo tan podrido... si hay un Dios que se supone debe cuidarlo. Pues ese Dios está obsoleto, el mundo se le ha escapado de las manos. Y va siendo hora de que otro Dios, más preparado, lo sustituya.

Siempre que estas reflexiones tengan lugar en la mente de Light (luz en inglés), la luz del sol estará siempre iluminando su rostro. Aunque él será un Dios de la noche, de la oscuridad, la luz del conocimiento lo alumbra. Igual que cuando descubre la libreta, la luz del sol ilumina su rostro. La recoge, la deja en el suelo y se marcha... pero cuando la luz del sol vuelve a incidir en él, Light se detiene y regresa a por el objeto.

Igual que la manzana cayó del árbol, la libreta cae del cielo. Y Light la “muerde”. La usa como medio, usa el pecado (el asesinato) como medio para un fin mayor: erradicar el dolor.

Nietzsche considera el budismo una religión mucho más realista que el cristianismo en cuanto no lucha contra el pecado, sino contra el dolor. El pecado no es un mal, a veces, de hecho, es un medio.

Light no es sólo un asesino, un pecador. Mientras duda sobre si usar o no la libreta que le ha “caído del cielo” se nos presenta como el mejor estudiante de todo Japón (y tal vez del mundo). Él es, a fin de cuentas, un súper hombre. Es el que está capacitado (seguimos con Nietzsche) para sentarse en el trono de ese viejo Dios moribundo y crear un nuevo mundo ideal... sin dolor.

También se revelan detalles simbólicos de gran calado en este primer capítulo. En el minuto 8 se nos muestra que la habitación de Light está en la planta de arriba. De hecho, es la única habitación de la casa que, aparentemente, se encuentra en este sitio elevado (e iluminada por la luz del sol, ojo). Cuando alguien, bien sea su madre o su hermana, se quieren comunicar con él, lo hacen desde abajo, al pie de la escalera, hablando “hacia arriba”. Ésa es la forma de comunicarse con los dioses. El espacio personal de Light, su templo, se encuentra elevado, como corresponde a un Dios, cerrado a los humanos de pie, a los que sólo él permite la entrada (o no) a “su santuario”. De hecho, pide a su madre que jamás entre a su cuarto, él mismo se lo limpia.

La divinización de Light es constante tanto a nivel literal como subliminal.

Y en el minuto 13 (qué cosas) tenemos el primer encuentro entre este nuevo Súper Hombre y quien ha puesto a su alcance el cuaderno: el Shinigami Ryuk. Éste confiesa que “tú eres el primero que siega tantas vidas en sólo cinco días. La gente normal se asusta y no llega a tanto”. De nuevo, Light Yagami no es normal.

¿Y qué decir del nombre de este “elegido”? Light. Luz. En efecto, en la obra de Nietzsche son innumerables las veces que se refieren a este Súper Hombre como la luz, el rayo, “el mediodía”. Sin embargo, Yagami, su apellido, significa, literalmente “dios de la noche” en japonés. Ya veremos el por qué de esta aparente contradicción.

Sea como fuere, Light Yagami no es un hombre normal. Es un Dios.

¿Y Ryuk? Vamos a dejar claro ya este punto. Ryuk come manzanas. Ryuk tentó con la libreta (el pecado) a Light. Ryuk significa “seis”. ¿Qué simboliza Ryuk? Obviamente, al diablo. (Si aún te preguntas a qué viene lo del seis... ¿cuál es el número de la Bestia?).

Hay centenares de evidencias de esto en el relato, pero bueno, sólo daré una más para no extenderme. En la última página del primer volumen del manga (no en el anime) Ryuk pide un regalo de Navidad a Light y éste responde: “¿No es muy raro que un shinigami celebre el nacimiento de Jesucristo?”.

De ahí que no podemos asumir a Light el papel del diablo ni de Satán, sería reducir mucho a este personaje que va mucho más allá.

Sabiendo esto, es curioso el papel de Ryuk en todo esto. De mero observador, viendo cómo los dioses se matan entre ellos.

¿O es que nunca han pensado que en el mundo hay mucho, muchísimos dioses? Y un sólo demonio... Los hombres se matan por sus distintas concepciones sobre lo que es Dios. Pero todos coinciden en su visión del demonio.

Sí, el Demonio debe disfrutar de lo lindo viendo a los dioses matarse entre sí mientras él sólo tiene que... comer manzanas.

Ryuk advierte a Light de varias cosas sobre el cuaderno de muerte fundamentales en el relato: “existen ciertos temores y angustias que sólo los humanos que lo han usado pueden experimentar”. Y, quizás una de las más importantes: “el humano que haya usado el cuaderno no puede ir al cielo ni al infierno”. En el último capítulo entenderemos este enigma.

Dice Light: “Esa libreta ejerce una especie de atracción diabólica que te induce a probarla, al menos una vez”. De nuevo, las manzanas, la tentación... el pecado.

Por cierto, el primer asesinato que comete Light lo saca de la televisión. Y el canal es el canal de noticias número 6. ¿Casualidad? Ya van dos seises.

En su periplo destructivo Light hará otra reflexión muy propia de Nietszche: “Bien pensado, ahora mismo todos me empiezan a parecer basura cuya muerte podría contribuir al bien común”. El Súper Hombre empieza a tener conciencia de su deidad. Empieza a sentirse superior.

Minuto 19. Todo está nublado, y mientras los rayos del sol atraviesan las nubes e inciden directamente (de nuevo) sobre el rostro de Light, éste toma plena conciencia: “Sólo yo puedo hacerlo”.

Pero es en la página 47 del manga donde se hace la revelación definitiva: “Estoy dando a conocer mi existencia al mundo. Estoy indicando que ahora hay alguien que imparte justicia”. Light quiere ser conocido, quiere que lo adoren, que lo sigan. Como todo profeta, necesita discípulos. Y ya veremos que más adelante los encontrará. Como el inicio del “Así habló Zaratustra”, se están dando los primeros pasos hacia una nueva era, pero queda mucho por andar aún.

Como Zaratustra nos enseña: "quien tiene que ser un creador en el bien y en el mal, en verdad, ése tiene que ser un aniquilador y quebrantar valores...".

Y en la página 49 del manga y en el minuto final del anime, Light dice, tras haber matado ya a más de cien personas: “Seré el Dios del nuevo mundo”. ¿Más claro?

Death Note. Capítulo 1: Renacimiento


“Death Note” es la historia de un enfrentamiento entre dos dioses. El Dios pagano, pregonado especialmente por el filósofo alemán Nietzsche (con influencias del budismo, los presocráticos y Schoppenhauer, como ya veremos); y el Dios cristiano, simbolizado por la Santísima Trinidad (Padre, Hijo y Espíritu Santo). Al final de la historia veremos cuál es el Dios vencedor de este duelo.

Además del dios Nietzschetiano, podríamos aludir al dios pagano de Death Note como el propio Satán, y una lectura desde este punto de vista no sería del todo desacertada, aunque incompleta. Y en estas páginas lo explico.

Ambos dioses son radicalmente distintos. El Dios cristiano es un Dios de la compasión (igual que el Budista), cosa que Nietzsche detestaba. Es en este punto donde Zaratustra (el alter ego de Nietzsche en su obra “Así hablaba Zaratustra”) y Buda discrepan: Para Buda, es la parte fundamental de su doctrina; para Zaratustra, un abismo que exige un gran salto, el peor de los pecados contra el hombre mismo.

Nietzsche, harto del culto a este falso Dios crea toda una filosofía en torno a un nuevo Dios (el Dios del nuevo mundo). Su obra “Así hablaba Zaratustra” empezaba transmitiendo que “Dios ha muerto (quizás la frase más famosa dle filósofo) y el hombre deberá sustituirle. Sí, será el hombre el nuevo Dios. Pero no un hombre cualquiera, sino el ‘Súper Hombre’, un hombre evolucionado, más perfecto y superior. Cuando este hombre superior tome su trono, los demás hombres (infrahombres) sobrarán, deberán ser purgados (eliminados). Más o menos, a grandes rasgos, éste es un resumen de la filosofía del Súper Hombre propuesta por Friedrich Nietzsche.

Pero vayamos por partes...

Introducción

Aquel cuyo nombre quede escrito en este cuaderno morirá...

Con esta idea inicial parte “Death Note”, uno de los mangas más importantes e influyentes a nivel mundial de los últimos decenios. Tres películas, un anime de 37 capítulos... toda una industria ha surgido a partir de esta obra publicada en nuestro país (España) por Glénat en 12 tomos. Escrita por Tsugumi Ohba y dibujada por Takeshi Obata, narra la historia de Ryuk, el shinigami –dios de la muerte- que deja caer su “cuaderno de muerte” (Death Note) en el mundo humano, lo que da inicio a un titánico enfrentamiento entre dos “elegidos”: Light Yagami, quien querrá usar el poder de este cuaderno para eliminar a todos los criminales del mundo, y L, que querrá detenerlo.

En este blog voy a intentar analizar pormenorizadamente todos y cada uno de los elementos, metáforas y secretos que se esconden tras el último portento dibujado y animado por manos japonesas.

Por supuesto, se me pueden escapar cosas, por lo que estoy abierto a cuantas sugerencias, comentarios y cuestiones queráis plantear en este foro.

Empecemos.